Miro estas fotos y pienso ¿Son realmente la misma persona? ¿Macarena y Dirty bitch podían convivir en algún momento?
En un momento de mi vida cuando ya daba todo por perdido, cuando iba a empezar una nueva etapa, cree un personaje.
Un personaje de todo lo que yo deseaba ser, y lo planifique. Va a ser un desastre, en todos los aspectos. Va a fumar, alcoholica y tal vez se va a drogar. Pero lo más importante no era eso, sino lo que venia internamente a lo exterior...
Yo era alguien que era tierna, no peleadora, una persona 'de bien' Buena alumna, buena bailarina y hasta buena amiga. Paciencia, siempre una sonrisa, super enamoradiza, y cada segundo buscaba que la admiren todos... pero eso no me servia.. porque cuando la gente se daba cuenta lo "frágil" que era, sabían por donde atacarme, sabían que decir para lastimarme o sabían que movimiento hacer para que yo caiga en mil pedazos... decidí dejar de ser "la chica transparente" para convertirme en "crazy bitch". No sabía porque, pero fue tal cual de un día para el otro. Cambie los pantalones de colores por jeans ajustados y buzos 2 talles más grande, empece a maquillarme, a usar lentes, y al "me chupa todo un huevo" como frase de cabecera.
Todo el mundo admiraba a esa chica. Era admirada en su grupo y en grupos ajenos también Las relaciones amorosas la respetaban y lloraban por ella, y ella no lloraba ya por nadie.
No puedo decir que no me gusto, mi resiliencia estaba dando sus frutos y cada vez una capa nueva del caparazón se iba formando, haciendo que sea totalmente inalcanzable siquiera tocar mi piel.
No volví a llorar desconsoladamente desde que Crazy bitch nació. Ella me protegía, era mi mejor amiga, ella cuidaba de que yo no esté mal. Y cada persona nueva, la conocía a ella, no a Macarena.
Es el día de hoy, que mi grupo que me conocía hasta 2do año del colegio conoció. Y no se como volver. No se como volver a tratar de estar con alguien y que en realidad no me chupe un huevo, que, como máximo, quiera "ahogar" a esa persona, pero no por amor, sino por obsesión.
A veces quiero sacarme la careta, dejar el traje en la cama y salir a caminar pero no puedo. Porque me pongo las vans, los auriculares y mi ropa de moderna, y camino sin mirar atrás. Era ella, mi resiliencia, mi punto de partida que caminaba por mí, ella me cuidaba, de que nadie "entre" a mi cuerpo, pero tampoco que nada "salga" de él. Me dedicaba a amarme a mi misma y a recibir amor, pero nunca a entregarlo.
El problema es que no puedo dejarla ir. Y hasta con ella tengo una relación obsesiva, se enoja cuando la quiero sacar de mi vida, y ahí es cuando entran en juego cosas que ya no puedo manejar...
Y ahí es cuando vuelvo a ser la persona que no llora, no siente, no quiere.
Y ahora veo esas dos fotos, y para mi, son dos mejores amigas, saludando al blog.
