Te extraño

¿Por qué me hablas?
¿Qué es lo que ganas?
Ya te diste cuenta: me volviste loca. En el tiempo que estaba con vos (y después que me dejaste) no hacia otra cosa que pensar en vos. Revolvías mi cabeza y cuando nos alejamos, pensé el porque de nuestros errores. ¿Podría mejorar algo? ¿Podría hacer algo para volver atrás el tiempo y arreglar cualquier cosa que hice mal?
En realidad, no tendría porque. En realidad la base de nuestra ruptura fue porque vos quisiste que nos alejemos, pero siempre me eche la culpa de todo, siempre te di la razón; la razón por la cual te gustaban otras personas era porque yo no te daba lo suficiente, si nos peleabamos era porque yo te ahogaba, si nos gritabamos era porque yo estaba histérica... Siempre fue mi culpa.
Y ahora volves a hablarme, no se para que lo haces. Tal vez te arrepentís de lo que hiciste, pero estoy segura que no. Estoy segura que estas cansado de jugar al papel de cobarde una vez mas. Estas cansado de buscar alguien que te ame como yo, y perdón por subestimarme, pero nadie lo va a hacer.
Y acá estoy, otra vez a tus pies. Dos palabras y modificaste mis pensamientos, mis ideales, mis ideologías. Dos palabras; con un solo "te extraño" dominaste mi mundo y me modificaste cual títere en plena obra de teatro.
No se como entenderte, si tomarte con pinzas o si celebrar nuestro reencuentro. No se si gritarte que te amo y que no quiero que te alejes, que estés acá conmigo y que modificaría continentes para que no te vayas, o simplemente, salvarme y decirte que no quiero estar mas con vos.
Tu presencia en mi vida es como jugar a la ruleta rusa, todo va bien hasta que te cansas de jugar, te retiras del juego y, por defecto, el arma dispara y siempre soy el rival perdedor, siempre tu enemiga, nunca tu aliada.
Quiero que te vayas y me trastorna la idea que te quedes. Quiero decirte que no me hables mas y a la vez que me llames todas las noches antes de irme a dormir. 
También quiero demostrar haberte superado y que no necesito nada de vos, pero es así, tus palabras y pierdo por afano, tu mirada y me pierdo en el pecado mas horrible que cometí.
No quiero hacerlo, quiero dejar de necesitarte.
Quiero dejar de depender de vos, de leer tu nombre y que me tiemblen las piernas, de verlo por casualidad y querer romper cualquier cosa que este cerca mio.
Quiero superarte, y que me de lo mismo hablarte.
Y conocí el amor verdadero... dándome cuenta que soy dependiente de alguien, cuando otras caricias y otros besos no me llenan.
Y no quiero que se termine. No me quiero dar por vencida, ni quiero ser cobarde, quiero que dejes de serlo. Y que no juegues conmigo, deja de jugar conmigo, no me hace bien.
Si solo supieras lo que solamente tu nombre significa para mi, no me hablarías
Si supieras que pienso en vos todo el tiempo, no me hablarías.
Si supieras que sos el irrevocable amor de mi vida, no me hablarías.
No me hablarías.
Pero lo haces. Y me hace la persona mas feliz del mundo.